La normativa europea en materia de iluminación de emergencia en instalaciones contra incendios se encuentra regulada principalmente por la norma EN 1838, también conocida como «Aplicación de la iluminación – Iluminación de emergencia», y por la norma EN 60598-2-22, que especifica los requisitos técnicos de luminarias de emergencia. Estas normativas son complementadas por directivas europeas sobre seguridad en el trabajo y edificación, como la Directiva 89/391/CEE y el Reglamento de Productos de la Construcción (UE) 305/2011.
La iluminación de emergencia es un sistema fundamental en instalaciones contra incendios, ya que garantiza visibilidad adecuada durante la evacuación en caso de fallo del suministro eléctrico. Este sistema debe contemplar tanto la iluminación de evacuación como la iluminación de zonas de alto riesgo y la señalización luminosa de equipos contra incendios.
Según la EN 1838, los niveles mínimos de iluminancia deben ser de 1 lux en el eje central de las rutas de evacuación, con una uniformidad mínima de 1:40. En áreas abiertas mayores a 60 m², se exige un nivel mínimo de 0,5 lux en el plano útil. Además, en los puntos donde estén ubicados equipos de lucha contra incendios (como extintores, pulsadores de alarma o bocas de incendio equipadas), la iluminación mínima exigida es de 5 lux en un área de 1 metro cuadrado alrededor del equipo, para garantizar su identificación y operatividad inmediata.
Las luminarias de emergencia deben cumplir con las disposiciones de la norma EN 60598-2-22, lo que implica que deben ser capaces de activarse automáticamente al producirse un corte de suministro, disponer de autonomía mínima (habitualmente de 1 a 3 horas), y someterse a ensayos periódicos conforme a las especificaciones del fabricante y la normativa aplicable.
En entornos industriales y edificios de uso público, el diseño del sistema de iluminación de emergencia debe integrarse con el plan de autoprotección, garantizando la continuidad de la visibilidad operativa en escenarios de evacuación y emergencias por incendio, cumpliendo con los criterios de fiabilidad, redundancia y mantenimiento establecidos por la legislación europea vigente.